La frase emblema de los comienzos de la renovada democracia, pronunciada por el Fiscal Strassera , de quien se cumplen tres años de su
partida , no fue ningún vocablo vinculado al derecho ni tampoco a las formalidades académicas. Utilizó un lenguaje llano , liso y comprensible, tal
como lo marcó en el alegato final en el Juicio a las Juntas:" Quiero
renunciar expresamente a toda pretensión de originalidad para cerrar esta requisitoria. Quiero utilizar
una frase que no me pertenece, porque pertenece ya a todo el pueblo argentino.
Señores jueces: NUNCA MÁS".
A su vez , simbólicamente se transformaba
en el vocero del "pueblo argentino". El era quien elevaba la
voz y pronunciaba el Nunca Más, un pedido de a quienes repudiaban las torturas,
desapariciones y todas las aberraciones que habían cometido Videla, Massera y
Agosti, primeros responsables en cuanto a la jerarquía de mando así como a
Viola .Armando Lambruschini. Graffigna, Galtieri ,Anaya y Lami Dozo,
dueños de la vida de los argentinos, "loables" para dar ordenes y
librar una "guerra sucia", según su definición, pero cobardes a la
hora de defender a sus soldados en el frente de batalla y faltos de
valentía , ni el básico respeto al muerto tuvieron, desaparecían
personas para que con ellos desaparecieran historias e identidad.
La historiadora Maria Elena Stella, subraya que el
Juicio a las Juntas Militares fue una linea demarcatoria ,la culminación de
todo un proceso, pero es, a su vez y fundamentalmente, la piedra basal de todo
lo que vendrá después en materia de justicia retroactiva. Las posteriores
decisiones políticas, las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, los
indultos del presidente Carlos Menem no pudieron, sino transitoriamente,
debilitar la cuestión de los derechos humanos en la Argentina ( ndr disiento
con Stella, la memoria de lo sucedido en la dictadura cada vez más tiende a
diluirse entre las nuevas generaciones, el paso del tiempo, discusiones
inconducentes que no permiten el debate, sumado a la escasa voluntad
política más preocupada en echar un manto de olvidad que en en generar un
interés genuino , son algunos de los factores).
Stella remarca el juicio a las Juntas como un hito en
el cual los militares gozaban aún de poder, estuvieron cargados de ,
presiones militares y enormes expectativas por parte de la sociedad y de las
organizaciones de derechos humanos, los cuales no hay que olvidar , ni
soslayar" dado que los juicios abiertos veinte mas tarde no resultan
concebibles sin aquel precedente realizado en un momento cargado de tensiones".
Norma Morandini , resaltó que "Aquel Nunca Más pronunciado por Straserra en el Juicio a las Juntas 1985 y en donde se respetaron los derechos y garantías de los acusados y acorde a lo que marca la Constitución Nacional, fue posible gracias un proceso gubernamental basado en la decisión de un presidente, que desafió los límites y resolvió juzgar a los responsables de la nefasta dictadura, brindándoles las posibilidad de defenderse, mostrando al grandeza de los hombres de bien de que ellos carecían cuando detentaba en poder".
Norma Morandini , resaltó que "Aquel Nunca Más pronunciado por Straserra en el Juicio a las Juntas 1985 y en donde se respetaron los derechos y garantías de los acusados y acorde a lo que marca la Constitución Nacional, fue posible gracias un proceso gubernamental basado en la decisión de un presidente, que desafió los límites y resolvió juzgar a los responsables de la nefasta dictadura, brindándoles las posibilidad de defenderse, mostrando al grandeza de los hombres de bien de que ellos carecían cuando detentaba en poder".
Una síntesis que une la sentencia judicial con el simbolismo de ver a los jerarcas en el banquillo de los acusados, la proporcionó el CEDINCI. "Una escena emblemática de aquella voluntad de reconstrucción democrática, fue la fotografía que evidenciaba la inversión de poder que el gobierno del pueblo traía consigo. Quienes durante siete años
habían sido los jerarcas de la vida y de la muerte comparecían ahora ante la justicia; y, desde el banquillo de los acusados, escuchaban y obedecían la orden impartida a diario por un ignoto secretario de juzgado ante la entrada de los jueces a la sala: “Señores, de pie”.
Los mismos genocidas , desde el banquillo de los acusados que debieron escuchar el aplauso estridente y sin fin que siguió a las últimas palabras del alegato del fiscal Julio César Strassera: “Quiero utilizar una frase que no me pertenece, porque pertenece ya a todo el pueblo argentino: " Señores jueces: Nunca más”. Ese Nunca más era, efectivamente, expresión de una voluntad colectiva de cerrar para siempre el largo capítulo de sangre y plomo de la historia reciente argentina.
Fuentes:
Reportaje al Dr. Julio César Strassera, 17 de octubre de 2000, Diario Judicial.com
Morandini, Norma:Gracias, Julio César Strassera: 27 febrero, 2015
Stella, María Elena,A un cuarto de siglo, reflexiones sobre el Juicio a lasJuntas Militares en Argentina Cuad. Cent. Estud. Diseñ. Comun., Ensayos no.52 Ciudad Autónoma de Buenos Aires ,mayo 2015.
Políticas de la Memoria n° 14 ,CEDINCI, verano 2013/2014.
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