sábado, 30 de abril de 2022

Ideas fuertes y números urgentes: así inauguró la Feria del Libro 2022

La alegría del encuentro tras la pandemia dio lugar a los reclamos del sector. El escritor Guillermo Saccomano sorprendió con un discurso durísimo. Volver, volver, como en una canción. “No se lo ve tan marchito”, decía en estos días un habitué de la Feria del Libro de Buenos Aires, pensando en el tango. Pero quizás no sea tango lo de esta edición sino más como la canción mexicana: “Este amor apasionado anda todo alborotado por volver”... Dos años de pandemia, dos años sin Feria han sido bastante para la industria editorial argentina y esta noche en que se inaugura la edición 2022 la sensación de alivio es inocultable. De hecho, a las 13.45, quince minutos antes de que la Feria abriera al público, se volvía a ver la escena clásica del evento: largas, sinuosas, colas para comprar entradas. Jueves, día laborable. Gente esperando para pagar una entrada para ir a ver -¿a comprar?- libros. Una foto de esa Argentina que a veces nos da nostalgia. En la apertura los discursos -siempre es el momento más político de la Feria- darán por concluida la pandemia pasando del alivio a los números y las ideas más duras. Pero primero, alegría. Así que aquí estamos; esta vez no en la sala grande de la Feria –la Jorge Luis Borges- porque allí se está desplegando la muestra inmersiva de Van Gogh. La inauguración ahora es en el espacio del Restaurante Central, tal vez más coqueto, tal vez más formal. Hay muchos abrazos, muchos saludos, estás igual, qué alegría volver a verte. Están los ministros de Cultura de Nación –Tristán Bauer- y de Ciudad –Enrique Avogadro- que, aunque hay una silla vacía entre ellos, conversan. Hay escritores –Enzo Maqueira, Ana María Shua, María Sonia Cristoff, Natalia Zito, Gabriela Saidon, Fabián Martínez Siccardi, Gustavo Nielsen, Silvia Plager-. Está el ex director de la Feria, Oche Califa. Muchos editores, de todos los tamaños (multinacionales, medianos, independientes). La gente “del libro”. Imposible no decir que las palabras que cruzarán el salón en un rato cambiarán un poco el clima. Cuando hable Guillermo Saccomano, el escritor invitado a abrir la Feria, que no dejará títere con cabeza. Por ejemplo, Saccomano hablará de problemas como la falta y la carestía del papel y apuntará a los dueños de las empresas que lo producen: “La falta de papel se debe a la menor producción de las dos empresas productoras de papel para hacer libros. Una es Ledesma, propiedad de la familia Blaquier/Arrieta, una de las más ricas del país, apellidos vinculados con la última dictadura en crímenes de lesa humanidad, además de relacionados con la Sociedad Rural, escenario en el que hoy estamos. La otra empresa es Celulosa Argentina. Su directivo es el terrateniente y miembro de la Unión Industrial José Urtubey, conectado con la causa Panamá Papers”. Dirá que la Feria siempre le generó tensión. Frente a los que hacen la Feria del Libro más concurrida de América latina, a los editores, a los imprenteros, dirá que la tensión no es sólo “porque uno se se topa con un injuriante pabellón Martínez de Hoz, que homenajea al esclavista y saqueador de tierras indígenas, antepasado del tristemente célebre economista de la última dictadura”. Que la tensión también se da porque “decir Feria implica decir comercio. Esta es una Feria de la industria, y no de la cultura aunque la misma se adjudique este rol”. Saccomano apuntará a los editores: “Nos sentamos en desventaja a ofrecer nuestra sangre, no otra cosa es la tinta. El editor es propietario de un banco de sangre compuesto por un arsenal de títulos publicados siempre en condiciones desfavorables para quienes terminan donando prácticamente su obra”. Y contará que pidió honorarios por este discurso y es el primero que los cobra. El acto había arrancado con palabras de Ariel Granica, que se inauguraba como presidente de la Fundación El Libro: “Logramos revertir la desesperanza. Tuvimos que enfrentar números que parecían imposibles de superar, pero volvimos a apostar a las palabras y a los libros y hoy estamos aquí”, dijo Granica. Y recordó que no solo la pandemia afectó a la industria: “A mediados de 2019, la macroeconomía volaba por los aires y las ventas perforaban los subsuelos”, dijo. Y luego, el coronavirus: “Asistimos a un freno de la actividad sin precedentes. Se desmoronaron las publicaciones y los tirajes, las importaciones y las exportaciones, quedaron en el camino más de 10 millones de ejemplares de producción. Vivimos la mayor transformación de las prácticas de trabajo y comerciales. Todo el sector tuvo que reinventarse.” Granica también iba a hablar de plata: “A pesar de producir el acontecimiento indispensable donde todo esto comienza, siguen siendo muy pocos los autores que pueden vivir de sus obras. En La Fundación defendemos que se valore y se remunere el trabajo de autores y autoras como corresponde, que se dé fiel cumplimento a los compromisos con ellos”, dijo. Y encaró el centro de su discurso: la industria enfrenta dificultades para importar por cuestiones de balanza comercial. Entonces propuso: “Nuestra visión sobre la cuestión del comercio exterior es que la Argentina exporta pocos libros, no que importa muchos”. Entonces, para no perdernos de leer lo que hay que traer de afuera, dijo, hay que salir más. Y para eso “por una parte, hay que internacionalizar a nuestros autores, cada autor y cada autora argentinos reconocidos en Latinoamérica y en España son una promesa de exportaciones sostenidas: eso requiere altos presupuestos que las editoriales no tienen. Por la otra, dar apoyos a las traducciones locales con el fin de que las editoriales argentinas aumenten la contratación de derechos de autores extranjeros para toda la lengua española. No es más que lo que hacen o han hecho los países con los que competimos”. Después de Granica llegó el turno de Tatiana Viera Hernández, por La Habana, la ciudad Invitada de Honor. además de recordar su propia feria, señaló: “La Habana y Cuba acude a la Feria en circunstancia extraordinarias: a los efectos económicos de las crisis mundial desatada por pandemia que nos ha golpeado a todos, se añaden los efectos del Bloque Económico, Comercial y Financiero de EUA en la cultura y su impacto en la industria del libro y en la publicación de las obras de los escritores cubanos”. Por los que no están Aplausos, silencio, una música sale de los parlantes y aparece la cara de Juan Forn, el querido escritor y editor que murió en junio de 2021. Es un homenaje a los que fueron y también están, entre otros, Tamara Kamenszain, José Pablo Feinmann, Carlos Busqued, Vlady Kociancich, Sergio Chejfec y hasta Quino. “Es la primera Feria sin Quino”, susurra alguien en el público. Es raro eso. Le toca el turno al ministro porteño Enrique Avogadro: “No sé ustedes pero probablemente están sintiendo la misma emoción de volver a la feria, de volver a nuestra feria”... dirá. Y enumerará las acciones que se hicieron desde su ministerio en los años de pandemia. Algo parecido a lo que va a hacer enseguida el ministro de Cultura nacional, Tristan Bauer. Que para arrancar transmite los saludos del presidente Alberto Fernández y luego recordará que, a partir de una modificación hecha en el gobierno de Macri, si no se deroga el artículo 4 la ley 27.432, fondos de emergencia que sostienen actividades culturales como el cine, el teatro, la música y las más de mil bibliotecas populares, cambiarán de rumbo e irán a Rentas Generales. Vienen de la venta de entradas de cine, sorteos y concursos deportivos. “La cultura es sanadora”, sentenció el ministro. Pero Granica, los ministros, la funcionaria cubana irían antes que Saccomano. Su discurso duro y a veces irónico -”No creo que mencionar el dinero en una celebración comercial sea de mal gusto”, dijo en un momento- era el comentario general después de los aplausos finales. Es que de estas cosas -de intereses, de emociones, de ideas que movilizan, gustan y disgustan- se ha tratado siempre nuestra Feria del Libro. Por algo es lo que es. Fuente: Kolesnicov, Patricia ( 2022), Ideas fuertes y números urgentes: así inauguró la Feria del Libro, INFOBAE, Buenos Aires, Argentina

sábado, 23 de abril de 2022

Iom Ha Shoà ve ha gburà, Dìa del Holocausto y Heroìsmo :" En Auschwitz no sólo murió el hombre sino también la idea de hombre...el propio corazón del mundo fue incinerado allì" ( Elie Wiesel)l

En su artículo "La Shoah y la complejidad de su transmisión” (" el ser humano des-humanizado",el docente y psicólogo Daniel Levin, explica el termino "Shoá" que viene instalándose en reemplazo del conocido término “holocausto”, ya que este último no lo describe e identifica auténticamente la a catástrofe, la destrucción pura, intenta poner elnombre a aquello impensable, inimaginable, inconmensurable, único, vivido en particular, dentro de nuestro pueblo judío. Agrega, lo complejo que es hablar sobre Shoah, dado que ocurren algunos fenómenos particulares.: Uno siente que le es difícil, que “cuesta” poner en palabras el horror y la locura extendida en tantos años.. Como docente, expone las dificultades con las que se encuentra al tratar de disertar sobre la Shoá:" ¡Cómo exponer una temática tan compleja y extensa como Shoaá en tan sólo una acotada presentación? ¿Acaso, aún teniendo los tiempos suficientes, se podría alcanzar a abarcar toda su magnitud?. Y suponiendo que pudiéramos sortear este “primer obstáculo”, ¿Por qué diseccionarlo en algunos breves ítems del mismo?. Por otro lado, Elie Wiesel, quien fuera una de las voces más reconocidas sobre la temática al ser sobreviviente del campo de concentración de Auschwitz Y Buchenwakd , defensor de los derechos humanos y Premio Nobel de la Paz en 1986, reflexionaba:" En Auschwitz no sólo murió el hombre sino también la idea de hombre...el propio corazón del mundo fue incinerado en Auschwitz "expresó alguna vez. Probablemente una de las más claras definiciones de lo que le ocurrió a los judíos durante la Shoá -en realidad, de lo que fue la Shoá la dio Elie Wiesel mismo::" No todas las víctimas fueron judíos. Pero todos los judíos fueron víctimas ". El recuerdo de la Shoah no lo abandonó nunca. Seguramente por eso, su humanismo trascendió mucho más allá, comprometiéndose con la defensa de los Derechos Humanos en general,, manifestándose contra el racismo y la discriminación; or su lucha en favor de los Derechos Humanos es que obtuvo el merecido galardón, el más importante de su vida: el premio Nobel de la Paz.Además de otras condecoraciones muy significativas. Levin, por su parte, terminaba su análisis, resulta imposible para nuestro raciocinio y nuestra manera de coherentizar la vida, estar escuchando y visualizando el límite de lo humano y su degradación auténtica. Es, sencillamente, “emocionalmente intolerable”. Nuestro psiquismo es una maquinaria perfecta, al igual que todo nuestro funcionamiento del organismo. Hay, por así decirlo, un sistema de autorregulación constante, que tiende a mantenernos protegidos de toda amenaza que pueda desestabilizarnos en nuestro sistema. Evitar el desborde de la angustia es uno de las metas de nuestro psiquismo. Sin embargo, ello no siempre es alcanzado eficazmente. Fuentes: Levin, Eduardo Daniel:. La Shoah y la complejidad de su transmisión” - El ser humano des-humanizado, Yad Va Shem ,Centro Mundial de Conmemoración de la Shoá, Jerusalem, Israel. Winter, , Rafel (2020).En memoria de Elie Wiesel, al cumplirse 4 años de su fallecimiento, Semanario Hebreo Jai, Uruguay.

domingo, 10 de abril de 2022

Mundial de polo femenino: nace en Palermo otro gran paso de las mujeres,

El campeonato organizado por la FIP e impulsado por la AAP comenzará este sábado con Argentina vs. Irlanda; tope de 16 goles de handicap y partidos con ventaja, hasta el sábado 16 La historia se repite al carbónico. Con diferentes actores y en otro contexto. Casi 35 años después de que la Argentina organizara el primer Mundial de polo de 14 goles de handicap, las legendarias canchas del Campo Argentino oficiarán como anfitrión de otro acontecimiento inédito en la historia de este deporte. Desde este sábado, con las selecciones nacionales de la Argentina, Brasil, Estados Unidos, Italia, Inglaterra e Irlanda, comenzará en la Catedral el primer Campeonato Mundial Femenino, organizado por la Federación de Polo Internacional (FIP). No es casualidad que la primera realización sea en la Argentina, más allá de su condición de máxima potencia polística del planeta. Desde hace cinco años la Asociación Argentina de Polo, encabezada por Eduardo Novillo Astrada (h.) entre 2017 y 2021 y por Delfín Uranga desde el año pasado, impulsan con más ahínco el polo femenino. De hecho, crearon el Argentino Abierto para mujeres. Visto su éxito, FIP apuntaló la iniciativa con la creación de la copa del mundo. “Para la AAP, institución que brega por la inclusión y la igualdad en el deporte, es un honor y un orgullo que el primer certamen se juegue en las míticas canchas de Palermo. Que haya un mundial femenino ayuda aun más al crecimiento del deporte y, fundamentalmente, posibilita el desarrollo de la industria”, expresó para LA NACION Delfín Uranga, hijo de Marcos, que fue el creador del mundial absoluto de polo de bajo handicap, nacido en Buenos Aires en 1987. 3 La historia se repite al carbónico. Con diferentes actores y en otro contexto. Casi 35 años después de que la Argentina organizara el primer Mundial de polo de 14 goles de handicap, las legendarias canchas del Campo Argentino oficiarán como anfitrión de otro acontecimiento inédito en la historia de este deporte. Desde este sábado, con las selecciones nacionales de la Argentina, Brasil, Estados Unidos, Italia, Inglaterra e Irlanda, comenzará en la Catedral el primer Campeonato Mundial Femenino, organizado por la Federación de Polo Internacional (FIP). No es casualidad que la primera realización sea en la Argentina, más allá de su condición de máxima potencia polística del planeta. Desde hace cinco años la Asociación Argentina de Polo, encabezada por Eduardo Novillo Astrada (h.) entre 2017 y 2021 y por Delfín Uranga desde el año pasado, impulsan con más ahínco el polo femenino. De hecho, crearon el Argentino Abierto para mujeres. Visto su éxito, FIP apuntaló la iniciativa con la creación de la copa del mundo. “Para la AAP, institución que brega por la inclusión y la igualdad en el deporte, es un honor y un orgullo que el primer certamen se juegue en las míticas canchas de Palermo. Que haya un mundial femenino ayuda aun más al crecimiento del deporte y, fundamentalmente, posibilita el desarrollo de la industria”, expresó para LA NACION Delfín Uranga, hijo de Marcos, que fue el creador del mundial absoluto de polo de bajo handicap, nacido en Buenos Aires en 1987. En esta primera realización del femenino, que tendrá lugar casi completamente en el campo de Palermo, las seis selecciones competirán con un tope de 16 goles de valorización femenina –handicap específico de las mujeres, distinto al general– divididas en dos grupos de tres, en los que se enfrentarán bajo la modalidad americana (todas entre sí). Los dos primeros equipos de cada grupo protagonizarán las semifinales el jueves próximo, y dos días más tarde, el sábado 16, se hará la final. Los nueve partidos del certamen serán transmitidos por ESPNPolo.com El equipo local (16), conformado por Agustina Imaz (4), Azucena Uranga (5), Catalina Lavinia (6) y Paulina Vasquetto (1), se estrenará este sábado a las 14.30, frente a Irlanda (16). “Defender la camiseta argentina en el primer Mundial femenino de la historia es un tremendo orgullo. Sobre todo, por lo que implica jugarlo en Palermo, con toda su historia atrás. Venimos de ganar la Copa de las Naciones y, más allá de la paridad de los equipos, tenemos muy buena formación como para levantar la copa”, comentó ilusionada la joven Uranga, que con 20 años intentará hacer honor al legado de su papá, Delfín, factótum de este torneo, y de su abuelo Marcos, ex presidente de FIP. Paradójicamente, Irlanda cuenta con una argentina, Inés Lalor. “Jugar este mundial por Irlanda va a ser una experiencia única pero muy rara. No me puse a pensar lo que puede pasarme cuando entre a la cancha 1 de Palermo para enfrentarme con mi país en el primer Mundial femenino de la historia”, expresó Ina, que con 30 años y 7 tantos es la polista de mayor valorización del certamen. Pero Lalor no estará sola en esa extraña situación de integrar otro seleccionado. Italia, que debutará contra Brasil este sábado a las 16, dispondrá de Camila Rossi y Maitena Marre, que fueron fundamentales para la azzurra en la obtención del último Europeo. “Este mundial va ayudar mucho al despegue del polo femenino. Si bien Italia no es una potencia, haber logrado el Europeo nos ilusiona con hacer un muy buen papel“, comentó Camila, la jugadora de más alta calificación en su conjunto. La Argentina, Estados Unidos e Inglaterra disputaron la Copa de las Naciones mientras se desarrollaba el Abierto de Palermo el año pasado, y el anfitrión resultó el campeón. Ahora son los que tienen la mayor valorización (16) del Mundial, junto a Irlanda, y aunque poseen 4 goles más que Brasil e Italia, se aguarda una competencia pareja, por la aplicación de la ventaja (4-0 inicial en favor de los cuartetos más débiles). Por otro lado, si bien el tope de handicap dificulta la presencia de las principales figuras del polo femenino en el planeta, el torneo será atractivo por la paridad de los equipos: el aprovisionamiento de caballos por parte de FIP será equilibrado entre los seis conjuntos, a la usanza del Mundial de 14 goles. Remozadas las tradiciones que acompañaron el crecimiento del polo a lo largo de su historia, la Federación de Polo Internacional definitivamente se aggiornó a las nuevas pautas. Si bien desde hace mucho tiempo se trabaja en el desarrollo del polo de mujeres, este mundial en la Catedral fomentará el progreso de las jugadoras y el interés. Sólo resta que el certamen tenga la continuidad de aquel primer mundial absoluto, el de Palermo 1987. El programa Sábado 9/4 Fecha 1 14.30 Argentina vs. Irlanda (P1) 16 Brasil vs. Italia (P2) Domingo 10/4 Fecha 2 14.30 Estados Unidos vs. perdedor 2 16 Inglaterra vs. perdedor 1 Martes 12/4 Fecha 3 14.30 Inglaterra vs. ganador 1 16 Estados Unidos vs. ganador 2 Jueves 14/4 Semifinales 14.30 1º zona A vs. 2º zona B 16 1º zona B vs. 2º zona A Jueves 14/4 Copa de Bronce 11 3º zona A vs. 3º zona B (en Pilar) Sábado 16/4 Copa de Plata 14.30 perdedor semifinal 1 vs. perdedor semifinal 2 Copa de Oro 16 ganador semifinal 1 vs. ganador semifinal 2 Vázquez, Andrés ( 2022).Mundial de polo femenino: nace en Palermo otro gran paso de las mujeres, con seis equipos. La Nación ( Argentina) 8 de abril de 2022 20:50 Andrés Vázquez PARA LA NACION.

Pesaj, nos da la posibilidad de volver a dar significado pleno a la fiesta y permitir que después de 3000 años de historia, nuestra generación y las que nos continúen puedan mantener la cadena del pueblo judío de forma vital ( Rabino Rubén Saferstein)

Pesaj es la primera de las grandes fiestas mencionadas en la Torá, No solamente conmemora la liberación del pueblo de Israel de la esclavitud en la tierra de Egipto, porque esa respuesta limitaría la celebración a un momento histórico pasado. “En cada generación cada judío debería sentirse como si el mismo hubiera salido de la tierra de Egipto”. En Pesaj confluyen tanto el pasado, el presente y el futuro en el marco de la tradición judía y es un encuentro con D´s y con nuestro pueblo. “En la noche de Pesaj todo lo que ocurrió en Egipto se renueva y reactiva como experiencia, y esto ayuda a hacer una realidad la redención ultima”, como dijera Luzzato. Pesaj constituye la gran ocasión para poder reunirnos en el marco de la fiesta con el universo formado por la imagen de los cuatro hijos que nos preguntan desde el lugar de la erudición, de la rebeldía, de la simpleza y del desconocimiento acerca de nuestra historia. El seder nos permite volver a experimentar la esclavitud y la redención que ocurre con cada uno de nosotros todos los días de nuestra vida sin olvidarnos que al pronunciar la melodía “Abadim ainu ", fuimos esclavos en la tierra de Egipto y ahora somos libres, aprendemos que la liberación es un proceso permanente. Podemos ser aún esclavos de nuestros cuerpos, prejuicios y pasiones y debemos reconocer que esta condición que trasciende al pueblo judío continúa existiendo hoy. Por ello, en este Pesaj, junto a la lectura de la Hagadá, en el marco de la cena festivanos nos da la posibilidad de volver a dar significado pleno a la fiesta y permitir que después de 3000 años de historia, nuestra generación y las que nos continúen puedan mantener la cadena del pueblo judío de forma vital. Jag sameaj ! Rab. Ruben Saferstein

viernes, 1 de abril de 2022

Lo que no sabemos de Malvinas

El sociólogo Sebastián Carassai, en "Lo que no sabemnos de Malvinas", publicado por Siglo XXI editores de Argentina de focaliza su análisis en canciones, publicidades y piezas de humor gráfico, así como en las voces de la comunidad isleña transmitidas a través de viajeros argentinos. La Guerra de Malvinas, de la que el 2 de este mes se conmemora el 40º aniversario del desembarco de soldados argentinos en las islas, fue un punto de inflexión en la historia argentina. Y abrió muchos debates, no sólo respecto de qué hacer para recuperar la soberanía sino también sobre su rol en el desprestigio y caída de la última dictadura cívico-militar, o de los apoyos populares que obtuvo fugazmente en esos días, y también del tratamiento que recibieron los soldados que volvieron del sur argentino y las formas de conquistar a los habitantes de esas islas. Pero, ¿cómo llegó el país hasta ese momento bisagra?¿Cómo se representaban en los medios argentinos a los isleños? ¿Y los medios malvinenses cómo se veían a sí mismos? Esas son algunas de las preguntas que intenta responder Sebastián Carassai en su libro Lo que no sabemos de Malvinas. Las islas, su gente y nosotros antes de la guerra (Siglo XXI Editores). “No es un libro sobre la guerra ni sobre la cuestión de la soberanía”, explica el sociólogo en diálogo con Página/12. “A excepción del epílogo, se trata de un libro que repara principalmente en la relación entre los argentinos y la comunidad que habita las islas en las cuatro décadas previas a la guerra”, detalla. El germen de este trabajo surgió hace casi diez años de artículos que Carassai encontró referidos específicamente sobre las Malvinas mientras hacía investigación para otro libro de él, Los años 70 de la gente común, y que entonces consideró que merecían un trabajo específico. “Llegué a personas clave para conocer algo más de la inédita experiencia de acercamiento que la Argentina y el Reino Unido exploraron a partir de 1971, cuando firmaron el Acuerdo de comunicaciones, que estableció un contacto fluido entre las islas y el continente”, recuerda. “Algunas de ellas (o sus familiares) conservaban archivos privados. Mientras avanzaba en esa indagación surgieron nuevas preguntas sobre otros períodos, como qué podía saber un argentino promedio de la comunidad isleña en los años treinta, cuando despertaban en Argentina grupos nacionalistas que prestaban cada vez más atención al tema”, desarrolla Carassai, que busca responder esa cuestión “basado en el análisis de las crónicas de los viajeros argentinos a las islas. Esos viajes se intensificaron en los años sesenta, en el contexto de la adopción por Naciones Unidas de la Resolución 2065. Ello me llevó a otra pregunta: ¿cómo fueron esos años en la comunidad isleña? Se fue construyendo en función de las preguntas que surgían de escrutar el archivo y de mis notas”, sintetiza. Así surgen en "Lo que no sabemos de Malvinas" Un surtidor de YPF y garrafas de Gas del Estado en las Malvinas, relaciones más o menos fluidas entre isleños y argentinos, maestras que enseñan español en Puerto Stanley, vuelos semanales a Comodoro Rivadavia, isleños que viajan a Buenos Aires para hacer tratamientos médicos, a Córdoba para completar el colegio secundario, a Bariloche para pasar sus vacaciones. Hoy parece inimaginable pero eso fue lo que sucedió, aun con episodios de tensión o desconfianza, durante los diez años anteriores a la guerra. Para varias generaciones de argentinos, las Malvinas están ligadas exclusivamente a la histórica reivindicación de su soberanía y, desde 1982, al conflicto armado con Gran Bretaña. Pero mucho de lo que hace a su historia anterior y posterior, y en especial al vínculo entre isleños y argentinos, ha quedado eclipsado. Sebastián Carassaidespliega un relato de impresionante riqueza para mostrar lo que todavía no sabemos o no pudimos pensar sobre las islas. ¿Qué hay detrás de la comunidad emocional que nos hace decir que las Malvinas fueron, son y serán argentinas? ¿Cómo fue amasándose ese sentido común? ¿Cuánto incidieron en esa certidumbre las crónicas de viajeros argentinos que visitaron las islas y que construyeron una imagen de ellas que les debe tanto a la observación como al deseo? A partir de fuentes poco visitadas o inaccesibles hasta ahora, Carassai pone el foco en esa pequeña comunidad de dos mil personas. ¿Qué problemas enfrentaban antes de la guerra? ¿Estaban conformes con el trato y las oportunidades que obtenían del gobierno británico? ¿Cómo vivían los reclamos de la Argentina, las sorpresivas incursiones aéreas de civiles y las alternativas diplomáticas? En un recorrido pleno de descubrimientos, también nos cuenta cómo es la sociedad heterogénea y próspera que hoy habita las islas, y hasta qué punto la guerra fue lo peor y lo mejor que le pasó. Ha corrido mucha agua bajo el puente y es legítimo preguntarse si tiene sentido leer otro libro sobre Malvinas, ese territorio a la vez tan ajeno y familiar. En este caso, dada su originalidad y riqueza, la respuesta definitivamente es un sí. Fuente: Depto de Prensa Siglo XXI Editores de Argentina Ackerman, S. (2022)."Un libro indaga en la relación entre los argentinos y los isleños antes de la Guerra de Malvinas", Página 12, Buenos Aires, Argentina.