viernes, 5 de noviembre de 2021

San Lorenzo 1982, la revolución para volver a primera

Informe Gabriel Fabrykant Para entender el descenso de San Lorenzo, hay que remontarse a 1975, cuando el club comienza a vivir una crisis institucional y futbolística que lo termina llevando a bajar de categoría. El equipo se había empobrecido. San Lorenzo no estaba acostumbrado a pelear en mitad de tabla para abajo. En el Metro 1975 termina 11° en mitad de tabla. En el Nacional 1976 no logra clasificar a la fase final terminando anteúltimo en la tabla de su grupo. En el Metro de 1977 termina 14°. En el Nacional de 1978 terminó último en su grupo. En el Metro de 1979 terminó en un grupo de 10 equipos en la séptima posición. En el Nacional de 1979 termina en mitad de tabla de su grupo, pero aquí sucede algo que marca la historia del club; el 2 de diciembre de 1979, San Lorenzo, dirigido por Carlos Bilardo, jugó su último partido en el “Wembley” porteño de capacidad para 76000 espectadores, empatando con Boca 0 a 0. El detalle de ese partido es que Hugo Coscia, jugador azulgrana, erró un penal. El estadio iba a ser clausurado para luego ser rematado años más tarde. Entre la gente, había algunos que ni pensaban en un cierre del Gasómetro, mientras que otros se lo venían venir por la crisis que pasaba el club antes mencionada. Después de finalizado el partido, un detalle para marcar fue que se abrió una puerta por la cual se ingresaba al campo de juego. Mucha gente arrancó “panes de pasto” como para llevarse un recuerdo de su querido estadio. Carlos Schamberger, Ricardo Collavini, y un juvenil Rubén Insúa jugaron ese último partido y estuvieron en 1982. En el Metro de 1980, ya sin estadio se alquiló la cancha de Huracán para hacer de local salvo un partido que se jugó en Vélez y en lo futbolístico finalizó 16° (arriba del antepenúltimo), y se salvó del descenso faltando dos fechas. En el Nacional 1980 quedó en mitad de tabla de su grupo jugando de local en Huracán. Ya en 1981, jugó el Metropolitano mayormente en cancha de Ferro como local, aunque también actuó en Boca, Vélez y Huracán. Llama la atención que de los primeros partidos como local recién pudo ganar en el quinto. Luego en la parte final de la primera rueda, sumó 6 partidos sin ganar. En la última parte antes de la fecha final, sacó 11 de 30 puntos y eso marcó un destino complicado (en esta racha no pudo ganar como visitante). El 15 de agosto de 1981, en cancha de Ferro, San Lorenzo recibía a Argentinos Juniors en la última fecha. Colón venía último y ya había descendido a Primera B. Se debía definir el segundo descenso a Primera B, y justamente el fútbol enfrentaba en Ferro a dos de los tres candidatos a descender, al “ciclón” y a los “bichos colorados”. También estaba Talleres de Córdoba que debía ganarle a Instituto de Córdoba como local para salvarse siempre dependiendo de que San Lorenzo pierda. Si, SAN LORENZO DEPENDÍA DE SÍ MISMO PARA SALVARSE DEL DESCENSO, ya que con un punto se salvaba de la B. La primera parte del campeonato lo dirigió Victorio Cocco y luego Juan Carlos Lorenzo (bicampeón en 1972 como DT) lo dirigió hasta el final. Ese día San Lorenzo formó con Mendoza; Verdecchia y Glaria; Villar, O. Rinaldi y O. Ruiz; Delgado, Milano, Perazzo, Insua y Ceballos. Cambios: Godoy por Milano; Quinteros por Ceballos (SL). La cancha estaba cubierta en un 70 % de su capacidad total aproximadamente. En el primer tiempo, a los 15 minutos se da un penal para San Lorenzo, el cual pateo Eduardo Delgado y que fue atajado por Alles. A los 39 minutos del primer tiempo, se sancionó un penal para Argentinos y Carlos Salinas le convirtió al arquero Mendoza. Se siguió intentando en el resto del partido. Nadie podía creer lo que estaba pasando. DESCENDÍA EL PRIMER GRANDE. Cuenta Sanfilippo que estaba en la platea y se decía a él mismo “¿qué hago acá?, faltan 10 minutos y nos estamos yendo al descenso”. Nadie podía entender y los hinchas estaban entre lágrimas y desazón. La tristeza invadía al público azulgrana, algunos se quedaban en el estadio sin poder entender lo que pasaba, otros se iban a sus canchas en llantos y otros se iban al Gasómetro (que todavía estaba abierto y pertenecía al club) a sentarse en la tribuna y simplemente desahogarse. Por su parte, Talleres le ganaba a Instituto y también permanecía en Primera División al igual que Argentinos Juniors. Con el descenso consumado, omenzaba el “fenómeno San Lorenzo”. La gente tenía tanta ilusión que lo acompañaba a todos lados, llenaba las canchas, San Lorenzo hacia que los rivales cambiaran su localia a otros estadios por las recaudaciones que generaba el conjunto de Boedo. Se jugó de local en Ferro con Gimnasia y con All Boys en las primeras fechas y se gano por 2 a 1 en ambos cotejos. Pero debido a la gran concurrencia que tenia la hinchada azulgrana se decidio cambiar la localia a Velez Sarsfield. Los primeros 16 partidos no perdió y recién en Santa Fé cayó con Colón. Comenzaba una época de reconstrucción para los de Boedo. Había que jugar en Segunda División y ascender rápidamente . Los hinchas transformaron la tristeza en alegría. En el plantel siguieron Cousillas, Insua, Quinteros, Verdecchia, Jorge Rinaldi, Raúl Moreno, Glaria, Collavini, Schamberger, Milano, Hugo Moreno. Arriban Héctor Osvaldo López de River. Héctor Raúl López. Omar Ros de Tigre. Hugo Sánchez de Colombia. Eugenio Morel Bogado de Argentinos. Oscar Quiroga de Talleres. Pablo Comelles de River. Miguel Batalla de Quilmes. Osvaldo Biain de A. Brown. Rubén Araoz de Colon. Eduardo Abrahamian de River. Ricardo Demagistris de Newell's. Carlos Suarez de Racing Club. También se suman Leonardo Madelon, Narasco, Escudero y Pérez. Se fueron Mendoza, Ruiz, Barrera, O. Rinaldi Scotta, Rodas, Delgado, Larrosa, Ceballos, Capurro, Rizzi, Perazzo, Godoy, Suñe, Belen, Montesano, Martínez, Stagliano, Daniel Acosta, Veloso y Montiel. Al campeonato se sumaban San Lorenzo y Colón, descendidos de Primera y se incorporan Lanus y Chacarita, ascendidos de Primera C. La “chancha” Rinaldi declara que si bien esperaba ver gente en las tribunas, no esperaba tanta convocatoria como la que hubo. Hinchas decían “menos mal que llegamos temprano ese dia” frente a Gimnasia de La Plata. Comenzaba el “fenómeno San Lorenzo”. La gente tenía tanta ilusión que lo acompañaba a todos lados, llenaba las canchas, San Lorenzo hacía que los rivales cambiaran su localía a otros estadios por las recaudaciones que generaba el conjunto de Boedo. Se jugó de local en Ferro con Gimnasia y con All Boys en las primeras fechas y se ganó por 2 a 1 en ambos cotejos. Pero debido a la gran concurrencia que tenía la hinchada azulgrana se decidió trocar la localía a Vélez Sarsfield. En los primeros 16 partidos no perdió y recién en Santa Fe cayó con Colón. Se hizo de local en la 9° fecha en cancha de River frente a Lanus con un empate sin goles. Se jugaba a cancha llena tanto de local como de visitante. Un record que se dio fue en la 6° fecha, donde Tigre hacia de local en el Monumental, casi todo era público azulgrana, 75.000 espectadores aproximadamente, solamente superado por la final del mundial de Argentina 1978 y por la final de Copa Libertadores 1996 ganada por River. En la 19° fecha asume José Yudica como DT y seria el que lo llevaría a San Lorenzo al titulo. De los 21 partidos jugados como local ganó 12 partidos, empató 7 y perdió 2. Se cumplen 39 años de uno de esos partidos, el 6 de Noviembre de 1982, San Lorenzo recibia a El Porvenir en Liniers. Si ganaba, se aseguraba su vuelta a Primera División, Eso fue con un gol de Rubén Insua a los 36 minutos del segundo tiempo y lo vencía por 1 a 0. Insua declaró “Tenía una gran responsabilidad, pero yo tenia mucha confianza, si, fui y agarré la pelota, tenia fe, por suerte entró...” Ese dia el de Boedo formó con Quiroga; Biain y H.O. Lopez; Comelles, Insua y H. Moreno; H. R. Lopez, Quinteros, J. Rinaldi, Batalla y Morel Bogado. La Recaudación: $ 2.459.565.000. El partido fue suspendido por el árbitro a los 87 minutos por invasión del campo por parte de un sector del Pueblo Azulgrana que festejaba el regreso a primera división. Un récord que se dio en la 6° fecha, donde Tigre hacía de local en el Monumental, casi todo era público azulgrana, 75000 espectadores aproximadamente, solamente superado por la final del mundial de Argentina 1978 y por la final de Copa Libertadores 1997 ganada por River. En la 19° fecha asume José Yudica como DT y sería el que llevaría a San Lorenzo al título. De los 21 partidos jugados como local ganó 12 partidos, empató 7 y perdió 2. Se cumplen 39 años de uno de esos partidos, el 6 de noviembre de 1982, San Lorenzo recibía a El Porvenir en Liniers. Si ganaba, se aseguraba su vuelta a Primera División, Eso fue con un gol de Rubén Insua a los 36 minutos del segundo tiempo y lo vencía por 1 a 0. Insua declaró “Tenía una gran responsabilidad, pero yo tenía mucha confianza, si, fui y agarré la pelota, tenía fe, por suerte entró...” Ese día el de Boedo formó con Quiroga; Biain y H.O. López; Comelles, Insua y H. Moreno; H. R. López, Quinteros, J. Rinaldi, Batalla y Morel Bogado. La recaudación: $ 2.459.565.000. El partido fue suspendido por el árbitro a los 87 minutos por invasión del campo por parte de un sector del Pueblo Azulgrana que festejaba el regreso a primera división. Lo llamativo como decíamos anteriormente: de visitante los rivales modificaban su localía debido a las altas recaudaciones. En Vélez se visitó a Defensores de Belgrano, Almirante Brown. Luego fue visitante en River frente a Tigre ,Estudiantes de Buenos Aires, Italiano y Chacarita, en Independiente frente a Los Andes, El Porvenir, Argentino de Quilmes, Talleres de Escalada y Arsenal de Sarandí, en Huracán frente a Morón, frente a Colón lo disputo en Santa Fe sin sacarlo de su estadio, en Banfield frente al local, en La Plata frente a Gimnasia en “el bosque”, en Ferro frente a All Boys y Deportivo Armenio, en Villa Crespo frente al local, en Lanús frente al local, y en Boca a Español y a Temperley. De los 21 partidos de visitante ganó 11, empató 5 y perdió 6. Los goleadores fueron Rinaldi con 16 goles, Héctor López con 12, Insua con 11, Morel Bogado con 9, H. P. Sánchez con 5, Moreno y Biain con 2, Ros y Comelles con 1. San Lorenzo volvía a donde pertenecía históricamente y hasta donde pertenece en la actualidad. En 1983 fue subcampeón y luego alternó buenas y malas. En 1995 de la mano de un hombre del club, Héctor Veira, volvió a triunfar en el torneo local. En 2014, logró saldar su deuda: ganó la Copa Libertadores. Desde ese momento alternó buenas y malas. Hoy San Lorenzo se encuentra en una muy mala campaña en el actual campeonato y la falta de idoneidad dirigencia que no deja trabajar con tranquilidad a los cuerpos técnicos bajo la excusa repetida: los resultados mandan. Aquel 1982 fue la sensación, la revolución que juntó a dirigentes, cuerpo técnico y jugadores bajo el mismo objetivo de retornar a primera que se concretó con creces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario